Vamos
con la tercera y última parte del año 1.982 que, como ustedes
mismos están pudiendo ver, fue un año realmente fructífero. Yo
diría que éste fue el primer año de los grandes años, lo cual no
es óbice para que a su vez sea uno de los más grandes de la década
gloriosa.
CORRALERAS
DE MAYO.- Primera sevillana de Loli Martínez “La canastera” que
viene a este blog. Paulino González y José M. Moya dan vida a esta sevillana que nos trae
recuerdos de aquellas cruces de Mayo tristemente desaparecidas.
AVE
SOLITARIA.- Sevillana de Los rocieros que representó un gran éxito
en el 82. Con letra de Ibáñez y música del omnipresente Moya, esta
sevillana fue la más escuchada de un disco del 82 que,
probablemente, fue el mejor de Los rocieros en su carrera, pese a que
no contenía su sevillana mítica el desamor.
GUADALQUIVIR.-
Y comenzamos con la producción de Los romeros correspondiente al año
82. Al igual que el 81 y al igual que lo que resta de década, Los
romeros se salen, con unas sevillanas realmente preciosas, algunas de
ellas entre las mejores de la historia de las sevillanas e incluso
algunas de las que yo llamo incomprendidas.
¿Quién
no han cantado nunca ”Llegaron por tí a Sevilla desde las tierras
extrañas, barquillas y galeones para admirar la Giralda”?. La
impresionante letra es de Juan Pablo Pérez Romero y la música de
Juan Díaz ¡Sevillana grande entre las grandes! Gran superexitazo de
Los romeros. Sevillana eterna que vence el paso del tiempo y sigue
cantándose en toda reunión de aficionados.
HABLANDO
DE AMOR.- Si éxito tuvo la anterior, el éxito de esta sevillana es
inenarrable. A decir verdad, yo diría que esta sevillana sonó en
un primer momento incluso más que Guadalquivir. Moya en la música y
Manuel Garrido en esta letra que narra la historia de dos chavales
que están hablando ese lenguaje que no hace falta aprender.
¡Silencio!
SEMANA
SANTA EN TRIANA.- La primera sevillana cofrade de Los romeros de la
Puebla es ésta dedicada a las Vírgenes trianeras. Aunque ya hablé
de ellas en uno de mis escritos dedicados a la Semana Santa se la
vuelvo a traer para que vuelvan a recrearse con ella, porque es
preciosa.
Después
vinieron más sevillanas cofrades de Los romeros, obviamente, pero a
mí ésta es la que más me gusta.
QUE
HABLE DESPUÉS.- Oliva escribió la letra grande de esta sevillana a
la que Moya puso música. Poniendo en su sitio a todo aquel que
critica la romería del Rocío desde fuera, sin haberla visto nunca,
sin haber andado el camino, sin haber, en fin, visto tantas cosas que
en el Rocío hablan por sí solas.
Los
momentos del Rocío son milagros de la fe y hay que estar ciego del
alma para no poderlos ver.
¡Que
vea a la Virgen y hable después!
EL
SOL DE LA MAÑANA.-Ésta es la última sevillana que traigo
a este apartado de antológicas de este disco, y
no porque las demás no merecieran estar, que sí, pero me atengo al
refrán “Lo mucho cansa, lo poco aburre”. Con éstas tienen
ustedes un ramillete suficiente para no aburrirse ni cansarse. De lo
que sí estoy seguro es de que se
embelesarán
con tanta belleza. Además, como ya he apuntado, me he reservado un
par de ellas para el apartado de incomprendidas.
El
sol de la mañana, con letra de Aurelio Verde y música de Moya es
una sevillana campesina, plagada de términos propios del campo, y no
por ello la gente de la ciudad dejó de cantarla. Gran exitazo
también del 82 que sonó profusamente en las gargantas de los
sevillanos.
LA
CARTA.- Voy a cerrar este año 82 con dos grandes éxitos de un
cantaor flamenco, probablemente el primero que hizo irrupción en el
mundo de las sevillanas, excepción hecha de Chiquetete, que quizás
no pueda considerarse del todo un cantaor flamenco por su
polivalencia. Escribo ahora sobre Paco Taranto, un trianero que ni
aunque cante sevillanas puede disimular su acento aflamencado y el
cante del que proviene
La
carta es letra de Paulino González y letra de Moya, garantía segura
de éxito; pero si además esta sevillana tan linda se pone en esta
voz tan flamenca...vean el resultado.
UNA
PLAZA DE SEVILLA.- Mismo escritor, mismo autor y misma voz para
conformar un conjunto que da como resultado este “Una plaza de
Sevilla” de reconocimiento grandioso aquel año.
Nadie
se apena; nadie siente escuchar esta sevillana tan preciosa, que no
pudo encontrar una voz más apropiada para su ejecución.
Seguimos
inexorable nuestra marcha por las sevillanas antológicas, avanzando
por esta década que tantas alegrías nos deparó a los aficionados.
Espero verles en 1.983, año que toca ya mismo.
1 comentarios:
Alberto, magnífico documento y repaso al mítico y glorioso año 1982, en cuestiones sevillaneras. Permíteme sólo una pequeña y anecdótica corrección: la sevillana "Corraleras de Mayo" de Loli Martínez "La Canastera", no pertenece a la cosecha de nuestro querido Pascual González, sino del gran poeta Paulino González y del Maestro Moya. En realidad Pascual, nunca llegó a compartir autoría con el monstruo de La Puebla del Río, lo que ocurre es que la firma de ambos en muchos discos aparecen como "P. González" y esa es la causa del error. Amigo, recibe un fuerte abrazo.
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