Continuamos
con el año 1.981 y les traigo ahora a ustedes como primer plato del
abundante menú de esta segunda parte de 1.981 una sevillana de esas
que uno se sorprende por la popularidad que consiguió.
LA
CARRETA DE MI PRIMA.- La grabaron al alimón Ecos de las marismas y
Diego de los Reyes y ha sido versionada después en muchas ocasiones.
Su autor fue Feliciano Pérez y no me voy a extender mucho sobre ella
porque estoy seguro de que todos ustedes la conocen ya, porque su
fama ha sido grande. Aquí se la dejo, para que la escuchen de nuevo,
PADRE.-
En el disco de Ecos de las marismas de 1.981, titulado “Entre los
grandes”, estaba esta sevillana con letra de Paco Coria y música
de Francisco Márquez. Se trata de una sevillana que versa sobre un
padre que lleva por primera vez a su hijo al Rocío y éste le reprocha
que nada de lo que se va encontrando a través del camino es como su
padre le había contado.
En
resumen, un reproche al cambio, para mal, que han venido experimentando
las cosas desde aquellos primeros rocieros hasta aquel momento, 1981,
y que a decir verdad no ha dejado de empeorar hasta nuestros días.
SALTA
LA REJA ALMONTEÑO.- Les traigo ahora tres sevillanas de Los
marismeños, ésta y las dos siguientes. Seguramente no sería nada
extraordinario que en un sólo disco Los marismeños incluyeran tres
sevillanas que devinieron en antológicas por su calidad y belleza,
pero en este caso si que resulta extraordinario, ya que el disco de
1.981 sólo incluía cinco sevillanas ya que el resto eran rumbas. O
sea, de un total de cinco, tres fueron sevillanas grandes donde las
haya.
En
esta primera, Los marismeños, en pleno apogeo de su carrera, invitan
a los almonteños a saltar la reja para coger a su Pastora. Una
sevillana preciosa con música, al igual que todas las del disco, de
Juanini.
DEL
COLOR DEL CARAMELO. Del color del caramelo tiene la Virgen la cara.
¿Quién no conoce esta sevillana? Onofre López a la letra y Juanini
a la música. Estamos ante una de esas sevillanas inmortales, grande
entre las grandes, merecedora seguramente de estar entre las míticas.
Poco
puedo decir sobre ella que ustedes no conozcan ya. Simplemente, vamos
a escucharla de nuevo y vamos a imaginar lo bonita que está la luna
iluminando la jara.
¡COMO TU CARA NINGUNA!
CUANDO
LLEGA LA FERIA.- Paulino González es el autor de la letra y como ya
hemos dicho Juanini lo es de la música de esta sevillana sobre
Sevilla, de gran popularidad en aquellos años, olvidada hoy, según
creo, porque la oigo cantar poco, pero bonita, muy bonita. Sevilla es
la que llena sus calle por ver, la imagen Macarena y su Gran Poder.
Honor
a Los marismeños, uno de los grandes, que comenzaban una década que también para
ellos seria gloriosa. Yo me atrevería a decir que la mejor de su
carrera.
PREGUNTADME.-
El Pali nos trajo esta sevillana de gran éxito en la que
invitaba a ser preguntado sobre cosas de aquella Sevilla antigua que
tan bien nos retrató en sus sevillanas. Nuevamente el Pali nos trae
semblanzas de aquella Sevilla que él conoció. El zeppelín,
un invento que visitaba periodícamente Sevilla y que obligaba a los
sevillanos a mirar hacia el cielo para ver aquel artefacto que causaba
asombro o el debut del rubio Pepe Luis, que no es otro que Pepe Luis
Vázquez, que por más señas tomó la alternativa en la Maestranza
el dia de la Virgen de los Reyes de 1.940.
Deléitense
con la voz del Pali que nos trae los recuerdos de aquella Sevilla.
Este es su legado y lo malo es que una gran mayoría de sevillanos lo
desconocen; pero para todos nosotros, los privilegiados amantes de
las sevillanas, yo se lo esbozo aquí para que puedan escucharlo.
MADRUGÁ
EN CALLE CUNA.- Esta sevillana del Pali no es muy conocida. No
obstante, es tanta su calidad que yo la incluyo en el apartado de
antológicas porque sin duda lo merece. Narra el devenir del Cristo
de los gitanos por la calle Cuna, en aquellos años en que Pepe
Valencia, un saetero de gran fama de la época, le cantaba a su Cristo y a su Virgen de
las Angustias. En la calle Cuna existe una placa conmemorativa.
Al
igual que la anterior, la letra la puso el mismo Pali y la música su
inseparable Federico Alonso Pernía.
VI
TU CARA EN PALACIO.- Cierro esta segunda parte del año 1.981 con una
sevillana de Los Doñana. Se trata de una sevillana obra de Santiago
Blázquez, y que también fue muy popular en su aparición y hoy
totalmente olvidada como prácticamente la mayoría de la obra de Los
Doñana, salvo esa Salve del Olé tan famosa.
Versa
sobre un flechazo; el amor que surge en el camino del Rocío. No es
un tema nuevo, ya que ha sido tratado en varias sevillanas, pero ésta
es particularmente especial. Oiganla y sabrán por qué.
Despido
la segunda parte del año 1.981, pero les emplazo para la tercera y
última, donde entre otras traeremos las sevillanas de los maestros,
Los romeros de la Puebla, que ya ese año comenzaron definitivamente
a salirse, y ustedes podrán notarlo no sólo en el increible número
de sus sevillanas antológicas de ese disco sino también en su
calidad.
Como
dicen en la televisión: No se muevan, volvemos pronto
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