SEVILLANAS ANTOLÓGICAS (XXIV)

Comienzo mi reseña de las sevillana antológicas de 1.982, que espero os guste.

CANTARÉ.- Cantores de Híspalis aparecen en el panorama musical con esta sevillana que según los mayores entendidos en este mundillo marca una tendencia. Y la tendencia que marca es una nueva forma de hacer e interpretar sevillanas, todavía incipiente, todavía en mantillas, pero dejándose ver ya en su preludio, preludio nada habitual en las sevillanas hasta el momento y que Cantores convertiría, no ya en habitual, sino además y con el devenir del tiempo en auténtico espectáculo de música, luz y color. 

La sevillana elevada a arte y representada en un escenario como nunca se había conocido. Éste es el nacimiento de esa nueva forma de ver y hacer las sevllanas, para más gloria de las mismas y por supuesto de Cantores de Híspalis, que lograron el justo reconocimiento a su labor creativa, como ya iremos viendo.

A NUESTRO AIRE- Esta sevillana abría el disco de Cantores de ese año. Sonó mucho e intentó hacer sombra en cuanto a popularidad se refiere a “Cantaré”. El singular genio de Pascual González patente ya en este disco que encumbró a Cantores dándole las alas necesarias para acometer su gran revolución; revolución que fue corta, pero tan intensa que elevó a nuestro querido género hasta cotas nunca sospechadas: El conocimiento a nivel mundial de nuestro cante.

NO ME CUENTES PENAS.- Sevillana muy alegre de Amigos de Gines que se cantó con fruición en aquella feria de 1,982. Y es que a decir verdad, es mucho mejor que nos cuenten alegrías y no penas. Hurtado y Pavón sus creadores.

NOCHES DE PRIMAVERA.- Qué verde está el trigo, qué verde el limón. Ésta es una de esas sevillanas sobre las que yo me pregunto ¿Hay alguien que no la haya cantado o tarareado alguna vez?

Un exitazo de los que hacen época en un año en que Amigos de Gines comienzan a consolidarse como un grupo, por fin, duradero, sin sobresaltos, sin salidas y nuevas entradas de componentes, si bien todavía eran cinco sus componentes y no será hasta 1.987 cuando se consoliden definitivamente en cuatro.

Esta noches de primavera es una de esas sevillanas eternas, que siempre será recordada por su grandeza. Sus autores, también Hurtado y Pavón; sus intérpretes Amigos de Gines y...todo el pueblo sevillano. Perfume en la noche de la primavera y besos de menta y canela. Después, ya se sabe; nacerá una rosa, nacerá un clavel.

CAPATACES EN EL CIELO- El Pali nos trae este tema grande donde los haya. Una de las pocas sevillanas que en Sevilla han rendido homenaje a una figura tan importante de nuestra Semana Santa como los capataces. 

 

Con la letra del propio Pali y la música de Federico Alonso Pernía, nos habla de cuatro capataces miticos: Alfonso Borrero, su hemano Jerónimo (conocido popularmente como “El cachas Borrero”), Pepito Reche, su vecino de la casa de la moneda y Rafael Ariza, “el viejo”, un capataz creador de una zaga al que yo veía año tras año cuando aún era un niño dirigiendo el paso de mi Piedad, a la que, como sabrá todo lector de este blog acompañé procesionalmente en aquellos años de mi niñez y juventud. Fugaces recuerdos desde luego, puesto que Ariza el viejo se nos fue al cielo en 1.966

El Pali en estado puro, cantándole a esos capataces que colaboraban a hacer grande su tan querida Semana Santa; nuestra tan querida Semana Santa.

¡LOOR AL PALI! Que no olvidó en su repertorio a los capataces ya en el cielo.

PRESUMIDILLA Y COQUETA.- El primer disco de los tan sólo tres que Gloria Bendita sacaron al mercado, fue éste cuyo nombre genérico era “Sevillanas 82”. En él tres éxitos rotundos y alguna que otra sevillana de las que yo llamo incomprendidas y que ya trataré en su día. 

 

Seguramente usted, querido lector, si no lo sabe, sería incapaz de adivinarme quién fue el autor y compositor de esta sevillana que nos ocupa ahora; y es que nos es otro que Pascual González, a quien se nos hace difícil imaginar fuera del ámbito de Cantores.

Paquito y Pedro a las voces. Dos grandes personas de las que ya hablé en mi escrito “La mejor sevillana de la historia”. Recréense con ellos.

NOCHE DE CUATROVITAS.- En esta otra sevillana de Gloria Bendita, cuya autoría corresponde a Antonio Rodríguez Ferrera, se nos habla de esa noche de parada rociera en Cuatrovitas, una finca en el término de Bollullos de la Mitación que alberga la ermita de la Virgen de Cuatrovitas, patrona del pueblo. En este lugar, la hermandad rociera de Sevilla, a la que pertenece Rodríguez Ferrera y por ello es que está siempre presente en su obra, pernocta en su primera noche de camino, noche a la que se alude en esta sevillana por su belleza.

JOSE, JOSÉ.- Una sevillana desenfada, también obra de Rodríguez Ferrera e incluida en el mismo disco de Gloria Bendita. Fue una sevillana muy popular en su tiempo y aún hoy en día es raro quien no la conozca y la recuerde con ese cariño especial con que se recuerdan las sevillanas desenfadadas que nos sacan una sonrisa.

 

(Disco de Gloria Bendita cuando aún eran Los deValme)

Según un comentario que hizo en en el emplazamiento antiguo de este mismo blog la hija de Rodríguez Ferrera, la sevillana estaba dedicada a un familiar de ellos, hombre que como ustedes podrán deducir por la letra “era una pieza de la cabeza a los pies”.

Lamento decirles que no busquen el comentario. Cuando me vi obligado a cambiar el blog de emplazamiento por los problemas que me daba el anterior, pude salvar afortunadamente toda la literatura y fotos, pero no así los comentarios, cosa que soy el primero en sentir.

ESTOY BUSCANDO UN QUERER- El disco de 1.982 de Los de la trocha seguía esa estela iniciada en esta década por el grupo ya sin Manuel Bernal en sus filas; estela que poco a poco fue languideciendo hasta culminar en su disolución en 1,983.

De este disco de 1.982 destaco esta sevillana de Feliciano Pérez, en busca de unos ojos verdes que tengan verde mirar, y con ella cierro la primera parte de este 1.982 que, al igual que el anterior año 1,981, viene cargado de sevillanas antológicas que les iré trayendo.

Estamos ya inmersos en la década prodigiosa, pero aún algunos de sus intérpretes no han aparecido, o simplemente, como Los del Guadalquivir, no han explotado con sevillanas antológicas, pero todo se andará.

Nos vemos en la segunda parte de este 1.982 que, como ustedes podrán ver, y de hecho ya han comenzado a ver con este primer escrito, fue también grandioso.